Este documental cuenta la historia del manejo del agua en los Andes centrales antes de la Colonia. Sigue los cursos del agua desde el Océano Pacífico hasta las cimas de la Cordillera Blanca y a medida que cruza los dramáticos valles de altura del norte del Perú y vuelve al mar, recuenta quince años de investigaciones sobre la tecnología hidráulica y el simbolismo del agua. El arqueólogo Alexander Herrera, doctor por la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y profesor de la Universidad de los Andes (Colombia), presenta por una parte, las relaciones entre los templos, las tumbas, los sistemas de riego, terrazas y el arte rupestre. Por otra parte, recuenta las tradiciones campesinas sobre las montañas de la Región de los Conchucos y del Callejón de Huaylas que vinculan su historia al presente. En el tiempo, la trama abarca desde la primera ocupación humana hace 10.000 años hasta el presente, pero enfoca de manera decidida las dramáticas secuelas de la colonización y el reasentamiento forzado en los siglos dieciséis y diecisiete.
Mediante entrevistas con campesinos locales grabadas in situ pone en relieve la escasez de agua y tierras como retos del presente, retos que el documental invita a repensar desde una perspectiva a largo plazo fundada en la historia. En experimentos diseñados para comprender las formas autóctonas de relacionarse con lagunas y montañas se despliegan trompetas de caracol pututo, elementos clave de los paisajes sonoros y ritos del pasado indígena. Así, paralelo al viaje en el tiempo y el espacio, discurre el viaje intelectual iniciado en 1995 por el protagonista. Imágenes históricas y material grabado en 2000 y 2012 ilustran el cambio de perspectivas, desde el cientificismo positivista hacia una arqueología decolonial.